No descartes

Cuando estoy de vacaciones siempre se me ocurren nuevas ideas para llevar a cabo a la vuelta;

y las anoto en una libreta para no olvidarme.

Esta vez, como el día estaba nublado y lluvioso, necesitaba hacer algo,

(y dormir la siesta no era un buen plan para mi niña)

así fue que comencé la búsqueda entre las maderas de descarte.

 Había mucho (en realidad todoooooo) que se podía reutilizar;

separé algunas maderas y con la ayuda de una mano amiga (Adrián)

logramos hacer este banquito,

después una mano de pintura y listo.

Le había dicho a Isabella que era para ella, y cuando lo ve me dice:

"No mamá, blanco no me gusta, rosa quiero..."

(ahhh....porqué criamos pequeños monstruitos??)

A la vuelta le di una mano de rosa muy sutil

así todos felices...

Fascinada con mi creación, y lo rápido que lo hicimos;

salí en búsqueda para mi segundo banquito.

Ya con la experiencia del anterior, éste salió mucho mejor y más rápido.

Las maderas son de tamaños distintos, y eso es lo que más me gusta.

Se pueden usar de banquitos para sentarse, apoyapiés,

mesita para revistas, lámpara de mesa...

"lo dejo a tu criterio"...jajaja

Hubiera armado algunos más, pero mi mano amiga ya se estaba cansando de tanto banquito,

"te parece hacer otro???"

(suerte que entraron en el auto, sino ya me veía haciendo dedo con los banquitos al hombro...jajaja)

Aún no tienen un lugar definitivo en casa, 

pero mi niña ya los estrenó:

uno para sentarse y el otro de mesita de merienda.

 

"He puesto mi corazón y mi alma en mi trabajo,
y he perdido mi mente en el proceso"
Vincent Van Gogh

FELIZ MARTES!!!